Kuro: ¿¡Guhah!?
Shiro: (De alguna manera estoy ganando. ¿Qué
diablos? ¿Qué está planeando? ¡No sé!)
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Esto es, de hecho, imposible para mí. Lo sabía
con certeza. Lo había entendido con seguridad. Aun así, no puedo negar que
nunca había tenido la esperanza de que tal vez la suerte estuviera de mi lado.
Sin embargo, parece que ese desarrollo demasiado bueno para ser cierto no va a
ocurrir. Si ese acontecimiento demasiado bueno para ser cierto fuera a suceder,
seguramente no habría experimentado tanto sufrimiento como el que he tenido
hasta ahora. Tal cosa nunca ocurrió, ya que este mundo no es tan agradable como
para permitirme tener esperanzas. La conclusión que se puede sacar de todo
esto, es que seré derrotado.
Lo había sabido con certeza. Lo había
entendido con seguridad. Sin embargo, ahora que esto ha sucedido realmente,
estoy lleno de remordimientos. De haber renunciado al derecho a elegir, de
haberme quedado estancado durante tanto tiempo. Así que esta es la brecha entre
mi oponente y yo, que ha estado constantemente avanzando, eh.
Shiro. Shiraori. Originalmente ella era
simplemente una reencarnación. A partir de ahí, hizo uso del Sistema de una
manera que nadie había logrado antes y logró el salto a la divinidad. Incluso
teniendo en cuenta que hizo uso del poder del Sistema, todavía produjo un
milagro para que un ser vivo normal alcanzara la divinidad. Es dudoso que ella
misma entienda lo grande que ha sido su logro, pero fue suficiente para que D
se desviviera por otorgar un nombre y hacer una invitación a convertirse en su
pariente. Supongo que es lo que la gente llama un genio.
No existe el concepto de "genio"
entre nosotros, los dragones. Los dragones nos hacemos más fuertes simplemente
por estar vivos, alcanzando naturalmente la divinidad. Como somos una especie
destinada a alcanzar la divinidad, nuestra fuerza es proporcional al tiempo que
hemos vivido. Los dragones son iguales dentro de la misma generación, no pueden
rivalizar con los de una generación más antigua y no perderán ante los de una
generación más joven. Así son los dragones.
Tampoco son solo los dragones. En un nivel u
otro, para la mayoría de los dioses, su fuerza está directamente relacionada
con su edad. Es por eso que, desde mi punto de vista, es extremadamente absurdo
experimentar la situación actual en la que un dios novato que acaba de nacer
puede ser más que un rival para mí. Me he vuelto capaz de comprender
completamente los sentimientos de quienes ven la diferencia irrazonable que
hace el talento entre las personas.
Su magia espacial está por encima de la mía.
Aunque fui capaz de ejecutar un ataque sorpresa y arrastrarla a mi dominio,
incluso eso está siendo constantemente superado. No sucederá pronto, pero si mi
territorio es sobre escrito, entonces la situación se volcará. La situación
empeora cuanto más tiempo pasa. Sin embargo, una vez que mi ataque sorpresa no
logró una victoria rápida, era inevitable que se convirtiera en una batalla
prolongada. Además, sabía que, si se convertía en una batalla prolongada, sería
una desventaja para mí.
Parece que Shiro tiene tendencia a
sobrevalorarme. Ciertamente, estoy por encima de ella en cuanto a mi rango como
dios, considerando nuestras cantidades totales de energía pura. Sin embargo, si
preguntas si eso está directamente relacionado con la capacidad de combate, la
respuesta es no. Los dragones aprenden conocimientos y habilidades de los
dragones ancianos. Sin embargo, no tengo ninguno de esos dragones ancianos de
los que aprender. Como la autoeducación tiene sus límites, es probable que mis
habilidades se hayan quedado muy atrás en comparación con los dragones de mi
generación.
En primer lugar, no tengo ninguna experiencia
de combate con aquellos que son iguales o más fuertes que yo. Bueno, en este
sentido no soy sólo yo, supongo. El clan del dragón, el clan celestial y el
clan demoníaco. Desde que la lucha por la supremacía entre los tres grandes
clanes de dioses ha entrado en un periodo de guerra fría no ha habido
oportunidad para que los jóvenes dragones vayan a la batalla. Incluso si este
planeta hubiera funcionado con normalidad y los otros dragones no se hubieran
marchado, probablemente no habría tenido la oportunidad de luchar con un dios
igual o más fuerte que yo. Carezco por completo de experiencia en combate.
En cambio, antes de que Shiro se convirtiera
en un dios, experimentó la lucha con aquellos que eran iguales o más fuertes
que ella. Como dios, es probable que sea la primera vez que luche con otro
dios, pero aun así ha sobrevivido experimentando combates hasta el final. Eso
supone una gran diferencia.
Y más que nada, no estoy en plena forma.
La razón principal por la que Shiro me está sobreestimando es probablemente
porque está mirando mi capacidad máxima de energía. Desde el punto de vista de
Shiro, estoy seguro de que parecería enorme. Yo tampoco he estado viviendo en
todo este tiempo nada. Para los dragones, su rango como dios está ligado a
cuánto tiempo han vivido. En ese sentido, soy un dios algo poderoso.
Como cuando se mira un enorme contenedor en el cielo desde
cerca, ella está malinterpretando mi fuerza.
Humph. Soy un hazmerreír. Ciertamente, si hubiera
almacenado la máxima cantidad de energía que mi cuerpo pudiera contener,
seguramente sería capaz de lograr la victoria sin ni siquiera tener en cuenta
mi falta de experiencia en combate. Sin embargo, nunca habría dejado esa energía
por ahí. Si tuviera tal energía disponible, obviamente la habría utilizado toda
para ayudar a regenerar este planeta, ¿verdad?
Ahh, efectivamente. He gastado casi toda mi energía en
regenerar este planeta. He reservado algo para contingencias, dejando sólo una
pequeña cantidad de energía. Todo ha sido por el bien de liberar a Sariel
incluso un poco antes.
Todo lo que hay aquí son los restos del dios
Gyuriedistodiez. No es que me haya debilitado hasta el punto de perder ante
gente como Potimas, pero dicho esto, no me queda poder para vencer a un dios
del mismo rango que yo.
Es probable que Shiro piense que se enfrenta a una batalla
con escasas posibilidades de victoria. Seguramente no está pensando que en
realidad soy yo quien tiene pocas posibilidades de victoria. Si ella se
enorgullece, es probable que mi situación sea un poco más fácil.
Lo admito. Tal y como van las cosas voy a perder. No es que
no tenga una carta de triunfo. Pero, incluso teniendo en cuenta eso, es
sombrío. Todo lo que puedo hacer es ganar el mayor tiempo posible y reducir a
Shiro, aunque sea un poco.
En cuyo caso, me centraré exclusivamente en eso. Aunque
sólo sean mis restos, como dios mucho más viejo que tú no caeré fácilmente. Te
he confiado el resto a ti, Dustin.
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